¡Top 5 para bajar esa panza!
Aunque no lo creas el cambio en pequeños hábitos alimenticios, puede hacer una gran diferencia, cambia tu estilo de vida, y poco a poco verás una gran pérdida de grasa, y podrás decirle “adiós”, a esa panza.
Cuando se trata de perder peso no necesariamente tiene que doler para que funcione. Digamos que bebes dos botellas de refresco al día, con aproximadamente 240 calorías cada una, al cambiar esa bebida por agua, estarás reduciendo 3360 calorías por semana.
Una dieta más saludable es siempre una buena decisión, además que una vez que creas el hábito, se vuelve un estilo de vida y es aún más fácil llevar una dieta y vida saludable.

Objetivos claros
Escribe tu objetivo y mantenlo publicado en algún lugar que veas constantemente durante tu día a día, te servirá como recordatorio cuando quieras darte por vencido. Por ejemplo, si tienes establecidos los kilos que quieres perder, súbete a la báscula antes de comenzar, y pésate todos los días.
Estudios demuestran que el pesarte a diario mejora los esfuerzos para perder peso. Pero recuerda no obsesionarte, debes recordar que los kilos que peses no descifrarán entre la grasa y la masa corporal magra, pero puede ayudarte a mantener las cosas bajo control.

¡Más agua para tu cuerpo!
Todos debemos tomar mucha agua para que nuestro cuerpo pueda funcionar de manera correcta. Y para las personas que buscan perder peso el agua es primordial para lograrlo, de acuerdo con un estudio realizado por la Dra. Brenda Davy de la Universidad de Virginia Tech, descubrieron que dar a las personas 2 tazas de agua antes de cada comida resultó en una mayor pérdida de peso después de 12 semanas, el hacerlo antes de cada comida brinda saciedad. Si el agua natural no es tan de tu agrado puedes agregar fruta fresca o beber té verde, blanco o negro, también se asocian con un IMC (Índice de masa corporal) más bajo y menos grasa corporal.

¡Adiós carbohidratos procesados y comida chatarra!
No hacen nada bueno por ti, solo ganas grasas en donde menos quieres, como en el vientre. Si no sabes controlar tu antojo, mantén fuera de tu alacena todos esos antojitos que no te dejen lograr tus objetivos, y otra cosa muy importante, no vayas al super con hambre, porque tu antojo te ganará, siempre que vayas ve bien comido y con una lista de lo que necesitas, al hacer esto también te ayudará a cuidar tu bolsillo.
Si tu día transcurre más en una oficina, es recomendable que te lleves snacks saludables como; un puño de nueces, un sándwich, tu proteína en polvo, por nombrar algunos, trata de no tener nada insano en tus cajones del escritorio.

¡Come frutas y verduras!
Son ricas en vitaminas y minerales, te proporcionan mucha fibra y tienen pocas calorías. Para los que no son nada fan de las verduras, les recomendamos comenzar cada comida con una ensalada, te hará sentir saciedad, provocando que comas menos calorías en general. No le temas a la fructosa, la fruta no hará que aumentes de peso, y eso incluye a los plátanos y a los melones, solo recuerda nada en exceso.

¡Ejercita tu cuerpo!
Estés tratando de perder peso o no, es esencial que ejercites tu cuerpo por lo menos tres veces a la semana, 30 minutos. Recuerda no centrarte en una zona de tu cuerpo, lo mejor es que incorpores ejercicios en los que lo utilices todo. Puedes realizar una rutina con sentadillas, peso muerto, dominadas y flexiones, son ejercicios que puedes realizar en cualquier lado e incluso en espacios pequeños.
¡Tu salud es primero, nada es más importante que estés sano, lo mejor de estar sano es que también lucirás mejor!